Enseñar a su pequeño a ir al baño es un gran paso y puede ocurrir en diferentes momentos para diferentes niños. No existe una línea de tiempo mágica ya que cada niño es único. Algunos niños pequeños están listos para comenzar el proceso a los 18 meses, aunque un porcentaje muy pequeño de niños menores de 24 meses ya están completamente entrenados para ir al baño. Los dos años y medio, o incluso los tres, es una edad típica para que los niños empiecen.
Busque las siguientes señales para ver si su hijo está listo para comenzar a aprender a ir al baño.
Muestran interés en el baño. ¿Su hijo le avisa cuando está mojado? ¿Quieren verte ir al baño? ¿Están pidiendo usar ropa interior o pantalones de niños grandes? Todas estas son señales de que es posible que esté listo para comenzar a aprender a ir al baño.
Sus patrones se vuelven más regulares.. Defecan aproximadamente a la misma hora todos los días, no defecan por la noche y pueden pasar al menos un par de horas seguidas sin mojar el pañal, lo que significa que los músculos de su vejiga pueden retener la orina.
Están emocionalmente preparados.. Los niños que no tienen interés en usar el orinal, no quieren usar ropa interior y, en general, no les importa tener el pañal mojado probablemente aún no estén listos para comenzar el proceso.
Están físicamente listos. Se necesita cierta coordinación para usar el baño. Los niños deben poder caminar, sentarse, quitarse la ropa, subir al baño y decirle a sus padres o cuidadores que necesitan usar el orinal.
Es importante reiterar que cada niño es diferente y seguir el ejemplo de su hijo. Las niñas suelen aprender a ir al baño más rápido que los niños. Y si tiene varios hijos, los hermanos menores pueden beneficiarse al ver a sus hermanos mayores pasar por el proceso, lo que hará que sea más rápido para ellos. Pero esté atento a las señales mencionadas anteriormente: comenzar a aprender a ir al baño antes de que su hijo esté listo causará frustraciones para ambos y, a menudo, llevará más tiempo que si hubiera esperado a que mostrara más interés. También sepa que es común que un niño domine el uso del orinal durante el día, pero todavía tenga problemas para mantenerse seco por la noche. El entrenamiento nocturno suele tardar un poco más, a veces incluso unos años después de que se haya establecido la sequedad diurna.
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