Estrategias para no subir de peso durante la universidad
La universidad es un momento de gran cambio en la vida de los jóvenes, y en muchos casos estos cambios también pueden afectar nuestra salud y bienestar. Uno de los problemas más comunes que enfrentan los estudiantes universitarios es el aumento de peso. Entre la falta de tiempo, el estrés y la disponibilidad de comida chatarra, mantener un peso saludable puede ser un desafío. Afortunadamente, existen estrategias que pueden ayudar a los estudiantes a evitar subir de peso durante sus años universitarios.
Planificación de comidas y meriendas
Una de las mejores maneras de evitar subir de peso durante la universidad es planificar las comidas y meriendas con anticipación. Esto permite que los estudiantes puedan tener opciones saludables disponibles cuando tengan hambre en lugar de recurrir a la comida rápida o productos procesados. La planificación de comidas también puede ayudar a evitar consumir en exceso a la hora de las comidas, ya que se tiene una idea clara de lo que se va a comer.
Es recomendable incluir frutas, verduras, proteína magra y granos enteros en las comidas y meriendas, y evitar el consumo excesivo de alimentos altos en grasas y azúcares agregados. Para facilitar la planificación de comidas, se pueden preparar almuerzos y meriendas saludables con anticipación y llevarlos a la universidad en contenedores reutilizables.
Mantenerse activo
La vida universitaria puede ser sedentaria, ya que muchos estudiantes pasan largas horas sentados estudiando o asistiendo a clases. Sin embargo, es importante encontrar tiempo para mantenerse activo. La actividad física no solo contribuye a mantener un peso saludable, sino que también puede ayudar a reducir el estrés y mejorar la concentración y el estado de ánimo.
Los estudiantes pueden aprovechar las instalaciones deportivas de la universidad, inscribirse en clases de ejercicio, o simplemente dar largas caminatas por el campus en lugar de usar medios de transporte. Encontrar una actividad física que sea atractiva y que se disfrute puede hacer que sea más fácil incorporar el ejercicio en la rutina diaria.
Elegir opciones saludables en el comedor universitario
Para muchos estudiantes, el comedor universitario es una fuente conveniente de alimentos, pero también puede ser un lugar donde es difícil tomar decisiones saludables. Es importante familiarizarse con las opciones que se ofrecen y hacer elecciones informadas. Optar por ensaladas, proteínas magras y granos enteros en lugar de alimentos fritos y altos en calorías puede marcar la diferencia en la salud y el peso.
Además, es recomendable limitar la cantidad de postres y bebidas azucaradas que se consumen, y elegir agua o infusiones sin calorías en lugar de refrescos y jugos. Leer los menús con cuidado y hacer preguntas al personal del comedor sobre los ingredientes y la preparación de los alimentos puede ayudar a tomar decisiones más saludables.
Controlar las porciones
En un ambiente universitario, donde las comidas pueden ser estilo bufé, es fácil servirse porciones excesivas de alimentos. Controlar las porciones puede ser clave para evitar subir de peso. Esta estrategia implica no solo prestar atención a la cantidad de alimentos que se consume, sino también a la velocidad a la que se come.
Es recomendable comer despacio y disfrutar cada bocado, prestando atención a las señales de hambre y saciedad que envía el cuerpo. Llevar un registro de las porciones y los tamaños de las comidas puede ser útil para tener una idea más clara de la cantidad de alimentos que se está consumiendo y evitar excesos.
Buscar apoyo y colaboración
En muchos casos, mantener un peso saludable durante la universidad puede ser más fácil si se cuenta con el apoyo de otras personas. Buscar amigos o compañeros de clase que estén interesados en mantener hábitos de vida saludables puede ser beneficioso, ya que se puede colaborar mutuamente en la planificación de comidas, la elección de opciones saludables en el comedor universitario y la realización de actividades físicas.
También puede ser útil buscar apoyo en servicios universitarios como grupos de apoyo para la salud y el bienestar, nutricionistas o asesores de salud mental que puedan brindar estrategias para mantener un peso saludable y reducir el estrés.
Conclusiones
Mantener un peso saludable durante la universidad puede ser un desafío, pero es posible con estrategias adecuadas. La planificación de comidas y meriendas, mantenerse activo, elegir opciones saludables en el comedor universitario, controlar las porciones y buscar apoyo y colaboración pueden ser útiles para evitar subir de peso durante estos años. Con un enfoque consciente en el bienestar físico y emocional, los estudiantes pueden disfrutar de su tiempo en la universidad sin comprometer su salud.
