La menopausia afectará a toda mujer en algún momento de su vida. La menopausia ocurre cuando los cambios hormonales hacen que el ciclo menstrual se detenga. Ya sea que esté al borde de este cambio de vida o justo en medio de él, hay cosas que puede hacer para controlar los efectos secundarios. Pero primero, es útil saber qué es cierto y qué no.
Aquí hay algunos mitos comunes sobre la menopausia y la realidad detrás de ellos.
MITO #1: LA MENOPAUSIA COMIENZA A DETERMINADA EDAD.
Hecho: Si bien la edad promedio de inicio de la menopausia es 52 años, esta no es una regla estricta.
¡Las mujeres pueden comenzar la menopausia entre los 30 y los 60 años! Técnicamente, la menopausia comienza cuando se deja de tener el ciclo menstrual durante 12 meses. Pero los síntomas pueden comenzar incluso antes de que esto comience: los síntomas perimenopáusicos pueden durar desde unos pocos meses hasta varios años antes de que comience la menopausia real.
MITO #2: LOS SOFOS SON EL SÍNTOMA MÁS GRANDE DEL QUE DEBO PREOCUPARME.
Hecho: Si bien los sofocos son un síntoma de la perimenopausia y la menopausia del que se habla comúnmente, hay muchos síntomas que pueden ocurrir (aunque no todas las mujeres experimentan todos los síntomas). Irritabilidad, fatiga, ansiedad, cambios de humor, baja libido, olvidos, aumento de peso y sequedad vaginal son sólo algunos de los síntomas que pueden experimentar las mujeres durante esta etapa de la vida.
MITO #3: LA INCONTINENCIA QUE OCURRE A MEDIDA QUE ENVEJECEMOS ES SÓLO EL RESULTADO DEL ENVEJECIMIENTO Y NO HAY NADA QUE PUEDA HACER AL RESPECTO.
Hecho: Es cierto que la menopausia puede aumentar el riesgo de incontinencia urinaria. Durante la menopausia, los niveles de estrógeno disminuyen, provocando una serie de cambios en el cuerpo. Sin el cuidado adecuado, los músculos del suelo pélvico pueden debilitarse, aumentando la posibilidad de fuga, o incluso prolapso de órganos pélvicos. La sequedad vaginal puede ocurrir cuando el revestimiento de la vagina produce menos moco. Y una disminución en la elasticidad de la vejiga puede aumentar la irritación de la vejiga y afectar su función, lo que puede causar vejiga hiperactiva (VH).
Pero si bien los cambios hormonales que aparecen con la edad pueden influir en los síntomas, hay muchas cosas que se pueden hacer para prevenir o controlar la incontinencia, empezando por cuidar adecuadamente el suelo pélvico.
Si experimenta alguno de los síntomas anteriores, hable con un fisioterapeuta autorizado que se especialice en la salud de la mujer lo antes posible para que pueda evaluar sus síntomas y establecer un plan de tratamiento adecuado.