Pregunta: Escucho acerca de los ejercicios de Kegel para mujeres todo el tiempo, pero ¿qué pasa con los hombres? ¿Pueden los ejercicios de Kegel beneficiar también a los hombres?
Respuesta: ¡Absolutamente! Los ejercicios de Kegel son una parte importante de la rutina de ejercicios de una mujer para prevenir o controlar las fugas de vejiga, pero son igualmente importantes para los hombres. En los hombres, los ejercicios de Kegel pueden ayudar con la incontinencia fecal, la vejiga hiperactiva, la retención urinaria, el funcionamiento eréctil e incluso los orgasmos. ¿Está interesado en ver los beneficios usted mismo? He aquí cómo hacerlos:
Cómo hacer ejercicios de Kegel para hombres
Hay dos tipos de ejercicios de Kegel que puedes hacer para fortalecer y tonificar los músculos del suelo pélvico.
Contracciones largas.
Las contracciones largas trabajan sobre la fuerza de apoyo de los músculos. Para realizar una contracción de Kegel larga, contraiga los músculos pélvicos y manténgala así durante 5 segundos. Esto puede resultar difícil al principio; no se preocupe si no puede mantener la contracción durante los cinco segundos completos. Con práctica, podrás lograr esto.
Con el tiempo, aumente hasta 10 segundos por contracción. Asegúrese de descansar 10 segundos entre cada contracción; saber cómo relajar el músculo es tan importante como la contracción.
Contracciones cortas.
Las contracciones cortas ejercitan los músculos de contracción rápida que trabajan rápidamente para detener el flujo de orina y prevenir fugas. Para realizar una contracción corta, contraiga los músculos rápidamente, luego suéltelos y repita.
¿Cuándo debo realizarlos?
Como cualquier músculo, no conviene hacer demasiado demasiado pronto. Intente realizar 5 repeticiones de contracciones cortas y largas, 3 veces por día en su primer día. A medida que ganes más confianza y fuerza, aumenta hasta 10 repeticiones, 3 veces por día de cada una.
Continúe practicando Kegels y debería ver mejoras en 3 a 6 meses. Y, si descubre que necesita ayuda con los ejercicios de Kegel, hable con su médico o fisioterapeuta. Ellos podrán brindarle instrucción más personalizada, que puede incluir terapia de biorretroalimentación.
¡Buena suerte!
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